Mostrándome por primera vez

Estaba viendo gifs animados en la misma página que bajaba minas para el celular y msn, solo que ahora hice clic en la sección gay. No me calentaba, era como estar investigando y debo decir que investigué mucho: fotos, chats, porno, imágenes de google, altavista, yahoo respuestas, más porno. Tuve que aprender a borrar el historial, cookies y todas esas hueás para que no me pillaran, ya que el computador era compartido.

Lo raro es que no lo tenía parado cuando veía porno, tenía calentura al ver dos hueones penetrándose, comiéndose el culo, pero quizás por el miedo a que me pillaran o que Diosito me esté viendo detenían mis aventuras en lo prohibido. Terminaba con todo el bóxer mojado, bien mojado. Tan mojado que me chorreaba por la pierna y tenía que ir al baño a pajearme. Todo esto lo hacía en las noches cuando todos dormían.

Una noche en que nadie de los que usa el pc estaría en casa por un viaje, entré en un chat y conocí a un tipo buena onda, tenía 16 igual que yo y nos quedamos conversando hasta las 6 de la mañana. Me dijo “¿quieres verme por cam?”, y yo más nervioso que la cresta, nunca me había mostrado a alguien, dije bueno, total qué hueá, hay que motivarse y descubrir nuevas cosas.

Nos miramos unos minutos y al rato estaba viéndole el pico. Era blanco, con la cabeza rosada y la punta mojada. Yo lo miraba no más, él quería ver el mío, así que me paré y bajé mis calzoncillos, que estaban manchados justo donde queda el glande. Le mostré el líquido pre seminal entre mis dedos y le gustó. Lo note porque sus labios hicieron algo como “ufff” y empezó a tocarse más rápido.

Eran las 7 de la mañana más o menos y en la cocina (que estaba al lado del living), se escuchaba que prendían una tele. Mis abuelos se habían levantado temprano y el Papa estaba haciendo una misa de no sé qué por la juventud y era noticia mundial. Mientras tanto, yo estaba con el culo al aire y masturbándome frente al pc haciendo acabar a un hueón.